nicolás campodonico

80°, el nombre de la pieza,  remite a la geometría intrínseca a su propio desarrollo, a la inclinación con la cual la pieza se repliega sobre sí misma y se incrusta en el terreno, y a la amplitud del ángulo de encuentro entre los dos planos que la constituyen.

Emplazada a unos metros del acceso principal de Puertos, 80° se inserta en el paisaje como un elemento escultórico/arquitectónico cuya función es la de generar un lugar de encuentro para la comunidad, un espacio de recreación, contemplación y meditación.

Apenas apartada del complejo urbanístico, la pieza se ubica en un punto estratégico donde convergen la llegada de la ciclovía y la entrada a la ciudad. Signada por su principio de dualidad, la pieza se estructura en base a sus propias ambivalencias:

…Un lado que refleja luz, otro que la absorbe

…Un lado que penetra el espacio, otro receptivo que lo adentra

Ligeramente descuadrada y asimétrica, la pieza está formada por dos planos inclinados que se encuentran en un ángulo de 80°. El plano más alto se eleva sobre el terreno hasta una altura aproximada de 12 m, está recostado hacia adentro y da al sur. El plano más bajo desciende  hasta una altura aproximada de 6 m, se recuesta ligeramente hacia afuera y da al oeste. La leve contorsión de sus planos está pensada para que reflejen el cielo y el verde respectivamente. El plano que espeja el cielo da plenamente hacia el sur y a la llegada vehicular al sitio.

El proyecto, a partir de su naturaleza reflejante, busca bajar el cielo a la tierra, colocar el azul del cielo entre el verde del entorno pampeano, integrando la pieza al paisaje y el paisaje al proyecto.